Páginas

sábado, 24 de septiembre de 2011

Sola, una vez más...

El tren parte y tú no estás.
Sola, una vez más, salgo en busca de mi camino.
Prometiste estar siempre para mí... Juraste que serías mi puerto seguro.
Duele admitirlo, algo en el fondo de mi alma me avisaba a gritos que no debía creerte.
Por eso no hiere estar así... Sola, una vez más.
Ya no rogaré por tu presencia. No... Nunca jamás.

No hay comentarios: